miércoles, 7 de julio de 2010

«El fracaso escolar no se evita con discusiones, sino con diálogo»

29-6-2010 - Diario Montañés

Los expertos coinciden en que el éxito académico reside en una buena comunicación entre profesores, alumnos y padres

Tardes perdidas con los amigos, demasiadas horas de PlayStation, un examen que se estudia el día anterior, el primer suspenso, la costumbre de recuperar en septiembre... así comienzan a subirse muchos jóvenes al tren del fracaso escolar, cuya última parada suele ser la estación del INEM.

La solución a este problema que se filtra en todas las aulas españolas no es sencillo, pero tampoco imposible. En Cantabria se ha producido un fenómeno de recuperación en el índice de fracaso escolar que lo confirma, ya que según los datos publicados por la Consejería de Educación para 2009, el 80,8% de los alumnos alcanzaron la titulación en la ESO.

Con el objetivo de seguir por ese camino, esta semana se imparte en Laredo, en el seno de los Cursos de Verano de la UC, 'La gestión del aula: estrategias para la creación de un clima escolar positivo y la prevención del fracaso escolar'. En él se descubren las medidas que simbolizan el nuevo aire educativo que pretende desterrar la frustración de las escuelas. La directora del curso, Pilar Lobeto, habla de la diversidad de culturas, de nacionalidades, de intereses y de capacidades que se aglutinan en los centros educativos: «Las aulas -señaló- son un reflejo de la sociedad, y ésta se caracteriza por la diversidad. Pero hay que saber manejar este aspecto. Por eso es importante conocer las prácticas educativas que favorecen el trabajo con grupos heterogéneos, mejorando el rendimiento académico de todos y cada uno de los alumnos».

El orientador del IES Bernat de Sarriá de Benidorm, Juan Vaello, apunta a la motivación como una de las claves en la actitud del profesorado, porque «el secreto para que un profesor consiga contagiar ganas es tener ganas él mismo. Todos tenemos recuerdos de profesores que nos engancharon y produjeron emociones positivas. Esa energía es el principal instrumento de motivación a cargo del profesor». Insistió también en el compromiso de los docentes a la hora de gestionar el aula, fomentando «un clima de convivencia sano y de trabajo, donde más que controlar a los alumnos se les enseñe autocontrol»

La educación académica no termina cuando suena el timbre, porque, como destaca Pilar Lobeto, la participación de los padres es crucial: «Tiene que haber una colaboración entre el centro educativo y la familia, que no vaya cada uno por su lado. Porque a los niños también hay que formarlos como personas y no valorar sólo sus resultados académicos, sino el esfuerzo y la evolución en su aprendizaje, para lo cual hay que estar junto a ellos a lo largo de todo el proceso educativo».

Atajarlo pronto

Para esquivar el fracaso escolar no hay mejor remedio que la prevención. En otro de los cursos de la Universidad de Cantabria en Santander sobre 'Orientación en Educación Primaria e Infantil se dota a los profesionales de las herramientas necesarias para educar a los más pequeños de la forma adecuada.

El orientador educativo Ismael Palacios destacó que «la inteligencia emocional es una de las claves para favorecer conductas saludables y prevenir otras que no lo son», y la psicopedagoga Araceli Angulo afirmó que «una tutoría no es hacer una asamblea en grupo, no es un cajón desastre. Hacer una buena labora tutorial es ir todos a una».

No hay comentarios: