2-4-2010
Educar no es sólo asunto de los padres
El II Congreso sobre Convivencia Escolar insta a coordinar los esfuerzos contra el 'bullying'
Que las acciones deben ser coordinadas entre familia, escuela y Administración, porque son éstos los responsables del 'bullying', es una de las conclusiones más importantes que se han extraído del II Congreso Internacional sobre Convivencia Escolar que, durante cuatro días, reunió en el campus de la Universidad de Almería a más de 700 personas de todo el mundo.
Durante el mismo, investigadores, docentes y estudiantes abordaron los principales aspectos que influyen en la convivencia en las aulas, tales como las dificultades y estrategias de aprendizaje, la motivación y el fracaso escolar, la educación intercultural, las necesidades educativas especiales, o los trastornos de la infancia y la adolescencia. Pero el tema estrella fue, sin duda, el del acoso escolar o 'bullying', término popularizado en España desde que, de unos años a esta parte, la violencia en las aulas haya cobrado protagonismo informativo. Se habló incluso de las nuevas formas de 'bullying', como son el 'ciberbullying' (acoso a través de internet) y la influencia de los medios audiovisuales.
Déficit de educación
De las múltiples ponencias dedicadas a este tema, se pudieron deducir varios aspectos que el director del Congreso, José Jesús Gázquez, profesor de Psicología de la Ual, ha recopilado en una serie de conclusiones. De ellas se extrae que el acoso escolar es, «en el fondo, una consecuencia más del déficit de educación actual tanto en la familia como en las escuelas», por lo que, al contrario de la opinión de muchos, en los colegios «no sólo se debe atender a la instrucción, sino también a la educación».
Sobre todo, si se tienen en cuenta algunos de los datos que se recogen tras la reunión a nivel internacional de los mayores expertos, y que comenta José Jesús Gázquez. «Parece claro que la familia -hoy, tan desestructurada- no da claros ejemplos de resolver sus bretes y problemas de modo sustancialmente pacífico», afirma, para lo que se apoya en datos como que más del 50% de las rupturas matrimoniales se han producido en el último quinquenio, lo que significa una cada tres minutos - «afectando a más de millón y medio de niños»- ; uno de cada cuatro hogares sufre violencia doméstica; y «el 70% de los niños reconoce haber sufrido maltrato».
Se trata de estadísticas realmente negativas que sostienen la teoría extraída en el Congreso de que no se puede dejar la educación de los niños exclusivamente en manos de la familia, aunque, como reconoce Gázquez, ésta se encuentre en el primer lugar del 'ranking' de responsabilidades en los casos de 'bullying'.
Respetar a quien enseña
Es aquí donde entra el juego el asunto de la autoridad del profesor en la escuela, que en el Congreso han juzgado fundamental para evitar el acoso escolar. Tal y como afirma Gázquez, los alumnos deben ser conscientes de la importancia de lo que se aprende en los centros. «No sólo se trata de instruirse en conocimientos, actitudes, y valores, sino que niños y adolescentes asuman que lo que se les enseña no es inútil, sino que les vale para el día a día de la vida; comprender esto, excluye la principal causa de la obstinación contra la autoridad escolar y de los comportamientos antisociales». Sin embargo, para ello es necesario «una labor de reconocimiento que han de facilitar conjuntamente la escuela y la familia».
Asimismo, las conclusiones del Congreso recogen que, dentro de la Escuela, debe haber mediación de todos sus componentes. Tal y como explica Gázquez, los profesores, sin responder violentamente, deben vigilar que no haya violencia, y de darse, ayudar a quien la sufra: «Convencer a las víctimas de que no aguanten solas».
Implicar a los alumnos
Por su parte, los agredidos no deben soportar la violencia en silencio, sino pedir ayuda a los mayores; y además, los niños conocedores de la violencia escolar, aún sin ser las víctimas, deben animar a éstas a que pidan ayuda. «De otro modo, aunque no agresores directos, serían, con su silencio, colaboradores del 'bullying'», afirma el director del Congreso.
Además, para que la autoridad del profesor no se vea mermada, es clave la actuación de la Administración, tal y como se expuso durante el Congreso, para proteger a los profesores.
Por tanto, ni la 'siempre culpable' televisión, ni videojuegos violentos, ni, en definitiva, causas ajenas a la responsabilidad directa de la comunidad educativa. Según se concluyó en el Congreso, «si se llevara a cabo una auténtica educación en valores - respeto, tolerancia, solidaridad, paz, comprensión.- no habría casos de 'bullying'. Es la educación, pues, la que falla». (Ideal)
No hay comentarios:
Publicar un comentario